Existen diferentes tipos de clima organizacional dependiendo del enfoque que se aborde. Generalmente se clasifican en:
-
Orientado a las personas: un clima organizacional enfocado en las personas es aquel que incluye un conjunto de valores y se preocupa por la responsabilidad de los resultados obtenidos por los empleados.
-
Orientado a resultados: son aquellas empresas que tienen como principal objetivo refinar los procesos para obtener los mejores resultados posibles.
-
Orientado a la innovación: este tipo de clima ocurre cuando se prioriza el tiempo y los esfuerzos en el desarrollo de herramientas y procesos nuevos e innovadores.
Características del clima organizacional
Hay varias características que permiten definir este concepto y cada una puede afectar el funcionamiento de una empresa.
Los principales elementos que componen al clima organizacional son:
-
Percepción general: el clima laboral es un reflejo de la percepción de los empleados sobre el ambiente interno de la organización.
-
Concepto multidimensional: algunos de los factores que influyen en el clima laboral son el estilo de liderazgo, la autoridad, el grado de conflicto y la autonomía de la empresa.
-
Medible: las propiedades del clima organizacional se pueden estimar con las herramientas adecuadas.
-
Complejidad: como el clima laboral es una percepción general de la experiencia de los empleados, es subjetivo, complejo y depende de diversos factores.
-
Único: las empresas pueden obtener una identidad única gracias al clima organizacional.