1. Sé puntual en tu entrevista
Es obligatorio llegar a tiempo a una entrevista de trabajo. No solo a tiempo: llega temprano. Le mostrará a tu futuro jefe lo puntual y organizado que eres. ¡Si no llegas 10 minutos antes, llegas 10 minutos tarde!
2. Haga su investigación sobre la empresa
Necesitas conocer la empresa como la palma de tu mano. Asegúrate de visitar su sitio web y recopilar información sobre su historia y valores. Además, es posible que te pregunten por qué solicitas este puesto.
Consejo: trabaja en la oferta de trabajo para estar listo para responder preguntas sobre el trabajo. Por ejemplo: ¿Cuáles son las tareas relacionadas con el trabajo?
3. No te olvides de la comunicación no verbal
La comunicación no verbal juega un papel importante en una entrevista de trabajo. ¿Estás mirando tus pies? ¿Tienes los brazos cruzados? ¿Te apoyas en el respaldo de tu silla?
Todos estos signos mostrarán actitudes introspectivas al entrevistador y no se sentirá libre de conocerte mejor. Asegúrate de tener esto en cuenta. Además, los empleadores observarán tu apariencia y cómo te presentas. Vístete sobrio y limpio.
Consejo: No olvides dar un apretón de manos agradable y firme al empleador antes y después de la entrevista.
4. Sé cortés con todos
¡Sí, con todos! Muestra tu mejor sonrisa y sé amable con cada empleado que conozcas. El empleador podría preguntarles a los empleados qué pensaron de ti después de la entrevista.
5. Esté preparado para su entrevista
Si quieres demostrar lo serio y motivado que eres en el trabajo, lleva siempre contigo tu CV, carta de presentación y referencias. ¡El empleador quedará impresionado por sus habilidades organizativas!
Recuerda que la forma en que termina una entrevista de trabajo puede ser casi o tan importante como tu desempeño durante la entrevista. Los últimos minutos de una entrevista pueden dar forma a la impresión general que el entrevistador tiene de ti, por lo que es especialmente importante pensar en cómo cerrarás.